La pretemporada tanto para la MLS como en Brasil, contrapunto de dos partidos de la Selección USA en los mismos días y las mismas ciudades, muestra que hay para todos los gustos. El punto alto será el Mundial de Clubes a celebrarse este verano en Estados Unidos.
Por Keyvan Antonio Heydari
Especial para The Miami Line News
En un preámbulo a un año cargado de fútbol una propuesta diferente y una apuesta de varios años. Una serie de partidos de pretemporada contestan la pregunta:
¿El fútbol brasileño de clubes es un producto de exportación o solo de consumo nacional?
La quinta edición del Florida Cup enfrenta clubes de São Paulo, Rio de Janeiro, Belo Horizonte y el Orlando City de la MLS cierra en una coyuntura futbolera. La pretemporada tanto para la MLS como en Brasil, contrapunto de dos partidos de la Selección USA en los mismos días y las mismas ciudades, muestra que hay para todos los gustos. El punto alto será el Mundial de Clubes a celebrarse este verano en Estados Unidos.
Muchos piensan que Lionel Messi es (¿todavía?) el mejor jugador del mundo, y Argentina es el campeón mundial y de América, pero los carioca y paulistas repiten: “Brasil es pentacampeón del mundo”. Así argumentó Rodrigo Almeida, que llegó con su camisa Tricolor del São Paulo y su familia a la cancha.
El clásico minero llevó más de 22,000 a la cancha en Orlando. Hay varios estimados, pero el Departamento del Censo (USA) estima unas 450,000 personas nacidas en Brasil en Estados Unidos, con unos 130,000 en Florida. Y es Orlando-Kissimmee-Sanford con la mayor concentración del país con los condados de Broward, Orange, Palm Beach, Miami-Dade también nutridos (22% de los brasileños del país viven en Florida.)
Pero llegaron también del norte, Como Polly Caruni, que aprovechó para huir del frío en Massachusetts yendo a la cancha en el sur de la Florida.

Brasil es un universo futbolero aparte, con los campeonatos estaduais, el Brasileirão y la Copa do Brasil.
El punto más alto fue el clásico mineiro entre Cruzeiro de Belo Horizonte y Atletico Mineiro, ambos campeones de la Copa Libertadores, que llevó más de 22,000 torcedores al estadio de Orlando, a reventar.
Orlando City, cuyo dueño cuando entró a la MLS, Flavio Augusto, su máxima figura (Kaká) y su actual director deportivo, Luiz Muzzi, son brasileños, cierra de anfitrión en un choque difícil. Para finalizar, la serie culmina el sábado con el enfrentamiento entre Orlando City SC y Atlético Mineiro.
Sin embargo, otros que no son del país amazónico también disfrutan de la combinación de fútbol en cancha y ambiente en las tribunas. Pablo Abella, vestido con la camiseta del Inter Miami, vino a disfrutar del clásico entre los gigantes de Brasil, y declaró: “Se viene a ver buen fútbol. En Flamengo hay varios uruguayos, y vengo a verlos a ellos. Y en el Inter Miami, no me canso de ver los goles [del uruguayo] Luis Suárez”.
Suárez, que jugó en Brasil, también estuvo en la cancha, pero observando como espectador.