Por Luis F. Sánchez
The Miami Line News
Sabor y salud son los elementos que inspiraron a la chef colombiana Ingrid Hoffmann a elaborar su quinto libro de cocina, el bilingue Clásicos Latinos a lo Saludable, que incluye más de 100 recetas de platos estrellas de nuestros países.
Lo más importante es que el libro cuenta con el aval de la Asociación Americana contra la Diabetes, pues las recetas que incluye son justamente pensando en las personas que tienen esta condición. Y, además, Hoffmann toma en cuenta otro factor esencial: la presión de la vida diaria en la actualidad que obliga a hacer todo a la velocidad del rayo.
Hoffmann afirmó que años atrás le diagnosticaron lupus, una enfermedad al sistema inmunológico que inflama los tejidos. Además, en su familia hay muchos casos de diabetis.
A raíz de su enfermedad, Hoffmann fue escuchando a su cuerpo y tomaba nota de lo que le iba bien y de lo que no. Llegó al punto que no necesitó más medicinas y gracias a una correcta selección de alimentos no solamente encontraba una energía extra sino un entusiasmo y unas ganas de vivir tan maravillosos que lo mejor que podía hacer era compartir estos beneficios de la naturaleza.
“Todo lo que conseguí no fue de golpe sino de una manera gradual”, explicó Hoffmann. “Poco a poco me quité el azúcar, las harinas blancas y el alchohol. Fui reemplazando ingredientes o combinádolos, por ejemplo, menos papa y en lugar agregar chayote. Incorporé la quinúa que ofrece una versatilidad notable y que en muchos casos puede reemplazar al arroz”.
Uno de los factores que impiden a las personas prepararse su propia comida es la falta de tiempo, la prisa de la vida diaria y la creencia de que la elaboración de una comida sana demanda el tiempo que uno no dispone.
Clásicos Latinos a lo Saludable no solo se encarga de desmentir ese temor sino que su autora ha puesto énfasis en brindar las herramientas para que cada una de sus recetas pueda ser elaborada de manera sabrosa y rápida.
“Ninguna de las más de 100 recetas que componen el libro toma más de 29 minutos en su preparación”, afirmó Hoffmann. “Todos son platos sencillos, y presentamos las técnicas, métodos y trucos para ser hechos en un tiempo razonable”.
Hoffmann tuvo la paciencia de seleccionar los platos estrellas de cada país.
“De España escogí la paella y la tortilla, a la que le pongo menos papa y más fibra”, explicó Hoffmann. “El ajiaco colombiano de pollo funciona muy bien y también incluyo un cebiche de palmitos”.
Si nuestros abuelos se demoraban toda una noche preparando los tamales para el desayuno del domingo, Hoffmann ofrece la alternativa acorde con la época en la que vivimos y responde a la evolución de los tiempos.
“Antes la gente caminaba un poco más y quemaba más energía, ahora en cambio muchas horas se pasan en el automóvil y por lo tanto la alimentación debe responder a la nueva realidad”, aseguró Hoffmann. “Por eso hay que combinar y balancear bien para tener todos los nutrientes necesarios”.
Una de las palabras que menos agrada a Hoffmann es dieta, porque se asocia con obligación y negación de lo que a uno más le gusta.
En ese sentido, Hoffmann es mucho más flexible, prefiere utilizar trucos para no cortar de golpe con lo que uno ha estado comiendo toda su vida, y por el contrario prefiere encontrar alternativas, ir reemplazando gradualmente los productos que más pasan la factura a la salud.
“Es importante, por ejemplo, fijarse en comprar carne de res que haya sido criada con grass natural”, explicó Hoffmann. “También hay que seleccionar el pollo que no haya sido criado con hormonas y antibióticos y darle bastante importancia al pescado. Son pequeños detalles, pero significativos porque van a permitir mantener una buena salud sin privaciones”.
Cuando le preguntamos si es saludable comer chocolate, Hoffmann respondió con un rotundo “sí, pero el dark”. ¿Y la miel de abeja? “También, porque es natural”. ¿Y el pan? “Si es integral”.
Con 53 años de edad, Ingrid Hoffmann luce hermosa, dinámica, llena de frescura y parece haber encontrado la piedra filosofal como los viejos alquimistas que no solo querían convertir los metales en oro sino encontrar la inmortalidad.
Hoffmann por lo menos ha descubierto la mágica combinación de sabor y salud, y la prueba la da el libro Clásicos Latinos a lo Saludable